Rahula es el hijo del
Buda que alcanzó la iluminación. A causa de esto, él tenía varias
preocupaciones. La gente alrededor de él inevitablemente lo miró con ojos
severos, sin embargo Rahula se dedicó sin un corazón arrogante a la práctica.
Estudió y se había entrenado a sí mismo bajo la guía de Shariputra, uno de los
diez grandes discípulos del Buda, quien fuera bien conocido por su
inteligencia. Esta actitud de formación fue respetada por muchos sacerdotes ya
que fue una 'práctica' no-verbal.
A muchos discípulos
les fue dicho por el Buda Shakyamuni que lograrían alcanzar la iluminación,
desde el Capítulo Tres / Una Parábola) al Capítulo Ocho (los quinientos
discípulos reciben sus predicciones) en el Sutra del Loto. Sin embargo, el Buda
no predijo nada acerca de su primo Ananda, o de su hijo, Rahula. Ellos no
pudiendo esperar más, le preguntaron al Buda sobre sus predicciones en el
Capítulo Nueve (Las predicciones para los que todavía tienen más para aprender
y los que no hacen). Dijeron, "Si recibimos las predicciones del Buda cuan
felices seríamos. Ananda le ha servido durante mucho tiempo y conoce de memoria
la mayoría de sus sermones, y Rahula es
tu hijo. Si las predicciones nos son dadas, nuestro deseo se realizará y muchos
de los seguidores quedarán impresionados. "el Buda Shakyamuni escuchó sus
palabras y les dijo que ellos lograrían la iluminación en el futuro.
Es difícil de vivir
la vida de un plebeyo, en el entorno severo nativo de de la India,
especialmente cuando la persona nació y se crió en la familia de un rey. Aunque
Rahula se hiciera un sacerdote a la edad de quince años, él era pequeño y a
menudo el Buda estuvo preocupado por él. Su destino cambió de diversas maneras,
él tenía un montón de problemas que otros no podían entender. Su virtud de
haber mantenido estrictamente las reglas mínimas de los preceptos religiosos
complicó su destino.
Es una de las
características del Sutra del Loto, El perseverar en que no es difícil alcanzar
la iluminación. Incluso en el juego inocente de los niños de construir una
estupa se convierte en un factor para alcanzar la iluminación, como es expuesto
en el capítulo segundo del Sutra del Loto. Las personas que sostienen servicios
conmemorativos para las diversas cenizas del Buda, las personas que construyen
estructuras espirituales y torres a partir de tierra y suciedad, los niños que
recogen arena con el fin de construir estupas, todos aquellos son los que han
completado el camino del Buda. El Sutra del Loto expone esto y aunque no es una
práctica severa, la iluminación puede ser lograda por la fe.
Breve charla, sobre diversos temas del Budismo (5)
Por el Rev. Gyokai
Sekido
(Continuará)
Gasshō, Yō kō
Namu Myōhō Renge Kyō.
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